

Hoy en día, cada vez es más difícil encontrar trabajo. Más aún si eres joven y no cuentas con la formación adecuada.

A lo largo de la vida escolar, son muchos los momentos y los motivos que pueden llevar a un alumno a quedarse rezagado y a perder el ritmo que le impone el currículum académico.
Como sabemos, existen muchos niños y jóvenes que sufren dificultades de aprendizaje. Además, algunos de ellos no están diagnosticados o no cuentan con las ayudas adecuadas. En otros casos, alumnos que han superado con éxito la Educación Primaria, encuentran problemas cuando se convierten en adolescentes; diversos factores se combinan en esta etapa que pueden ser caldo de cultivo para un futuro fracaso escolar: círculos sociales desfavorables, falta de autoestima y motivación, consumo de sustancias, bullying, ausencia de límites por parte de figuras educativas o bajos niveles de madurez y autonomía.
Junto con la familia y los iguales, la escuela es uno de los agentes educativos más importantes en la vida de niños y jóvenes. A pesar de la dedicación y profesionalidad de muchos de los docentes, algunas veces no es suficiente para sacar adelante a estos alumnos que no consiguen alcanzar los objetivos académicos. Un sistema educativo anticuado con exceso de alumnado en las aulas, unos recursos y alternativas insuficientes y una metodología impuesta dejan en tierra de nadie a muchos jóvenes que no se adaptan a la norma tan fácilmente como lo hacen otros.
Muchos de estos motivos o la combinación de todos ellos hace que adolescentes y jóvenes en edad escolar abandonen sus estudios incluso antes de haber obtenido el título de graduado en ESO o graduado escolar.

Por suerte, una ventaja que sí nos brinda el sistema educativo actual es que pone a disposición de estos jóvenes atajos académicos que les permiten obtener las titulaciones necesarias para acceder al mundo laboral. Una de estas vías es el conjunto de exámenes de preparación libre que se realizan anualmente, tanto para conseguir el título de graduado en ESO como para lograr el acceso a ciclos formativos de grado medio y superior, así como a carreras universitarias. El problema con el que se encuentran la mayoría de jóvenes que deciden optar por esta vía es que deben enfrentarse ellos solos a la preparación de los exámenes, con todas las dificultades que eso conlleva. Al tratarse de personas con perfiles de bajo rendimiento escolar, no suelen contar con los recursos y herramientas necesarias para preparar este tipo de exámenes: hábito de estudio, métodos de organización de planificación de tareas, capacidad y recursos de memorización, técnicas de estudio, etc.
Desde Centro TAP queremos ayudar a estos alumnos poniendo a su disposición nuestro “Curso anual de preparación para la obtención del Título en ESO”. Somos profesionales de la psicología y la pedagogía con amplia experiencia en el ámbito de la psicoeducación.
Trabajamos con grupos reducidos con los que preparamos los contenidos académicos de las distintas asignaturas y les dotamos de las técnicas y herramientas necesarias para planificar su estudio de manera adecuada y llevarlo a cabo de forma provechosa. Hacemos seguimientos individualizados de cada alumno, incluyendo tutorías personales y familiares, orientación vocacional, acompañamiento personalizado y una evaluación psicopedagógica a completa al iniciar el curso que nos permite conocer mejor las necesidades de cada alumno para poder ayudarle de manera más eficaz.
Ester Sánchez Moro