

Desde el contexto terapéutico, entendemos que la escritura es un complemento a la expresión verbal y puede ser una herramienta muy valiosa para aprender a canalizar todas las emociones, sensaciones y pensamientos que tenemos dentro de nosotros, que todavía nos hacen daño, y no sabemos o podemos verbalizar.
Es importante identificar y poder dar estructura a todo aquello que nos preocupa o nos perturba para poder expresarlo, aceptarlo y digerirlo con mayor fluidez, para no retroalimentarlo con nuestra propia percepción, y así poder gestionarlo de manera sana y eficaz.
Los beneficios mas destacados de la escritura terapéutica son:
- Damos equilibrio a nuestro lenguaje interno de manera organizada
- Desbloqueamos alguna experiencia o emoción negativa
- Nos ayuda a expresar como nos sentimos de manera más clara sin sentirnos juzgados
- Al verlo desde fuera, nos ayuda a relativizar los pensamientos negativos
- Ayuda a conocer mejor nuestra manera de sentir y de percibir el mundo
- Registrar lo vivido nos ayuda a canalizar y no sobrealimentar las emociones asociadas a los pensamientos negativos
- Al ordenar las ideas, reducimos la sensación de ansiedad
- Nos ayuda a mejorar el estado de ánimo
Por ello, cuando tenemos un gran malestar o no sabemos expresar lo que nos pasa, los profesionales de la salud mental solemos recomendar hacer un diario emocional, ya que intentar escribir de forma regular nos puede ayudar a desarrollar la capacidad de organizar nuestros pensamientos, sentimientos, experiencias e incluso los problemas, generando una autodisciplina y responsabilidad con un mismo y con esas vivencias personales.
Es una forma de liberar nuestras emociones más profundas, siendo mucho más conscientes de ellas, ya que al escribir potenciamos el autoconocimiento:
- Nos prestamos mucha más atención
- Nos focalizamos en lo que realmente importa
- Relativizaremos aquellas dificultades y emociones negativas
- Seremos más capaces de identificar y atender a nuestras necesidades
- Tendremos más capacidad de priorizar y tomar decisiones de forma más clara
- Nos ayuda a desahogarnos
De hecho, solemos recomendar escribir a mano porque al hacerlo estamos fomentando la estimulación cerebral, ya que activamos las áreas cognitiva, visual y motora, siendo una variable muy importante para generar la comprensión, aprendizaje y comunicación entre otros factores de protección. Al reflexionar sobre lo que hacemos y como nos sentimos de manera manufacturada nos estamos ayudando a liberar el estrés emocional y las emociones que pudieran estar bloqueadas.
- No solo al escribir podemos ayudarnos en el proceso de mejora y de bienestar, también al leer lo que ya hemos escrito (nuestros relatos y reflexiones), volvemos a recordar las impresiones que tuvimos derivadas de esos acontecimientos y experiencia previas pudiendo verlo desde otra perspectiva, tomando distancia de lo vivido, siendo más capaces de identificar dónde estamos y a dónde queremos llegar, qué pensamos y cómo podemos superar esas sensaciones negativas que nos han acompañado durante los últimos tiempos.
- Al tomar distancia de aquello que nos preocupaba en su día, podremos tener una visión más objetiva de esa situación, lo veremos con más claridad, pudiendo hablar de ello sin miedo.
Es importante saber que todas las experiencias del pasado hacen de nosotros personas más resilientes, aunque éstas hayan tenido un peso negativo, sin duda nos han hecho crecer y aprender de ellas y de nuestros posibles errores, decisiones, iniciativas… Por eso, os animamos a no quedarse anclados en los momentos negativos, sino intentar procesarlos, digerirlos y superarlos para seguir avanzando y evolucionando como personas en nuestros diferentes roles.
- Otra recomendación donde podemos encontrar beneficios al escribir nuestras vivencias es a través de cuentos y relatos con base de ficción, ya que, además de potenciar nuestra creatividad mediante su proceso de elaboración, escribirlos puede ser positivo para ayudarnos a hacer representaciones simbólicas de nuestra forma de percibir el mundo que nos rodea. Con nuestra imaginación, a través de los personajes y relatos creados, podremos liberar nuestros miedos e inseguridades, ya que al hacerlo “a través de terceros” nos atrevemos a transitar y dejar marchar de manera más eficiente todo aquello que llevamos tiempo acumulando.
- Para terminar, vemos como una gran oportunidad el verano, ya que puede ser muy buena época para la reflexión, puesto que al cambiar las prioridades y nivel de responsabilidades, podremos disponer de más tiempo libre; así que os invitamos a que saquéis tiempo para vosotros mismos, fomentéis el autocuidado dedicándoos un espacio para la reflexión y el autoconocimiento, identifiquéis como es vuestra formulación para gestionar vuestro día a día y si podéis, hacer algún cambio si fuese necesario para potenciar el bienestar.
“Toda escritura es un viaje al descubrimiento” Nadine Gordimer