

En la era del acceso total a la información, cuando en minutos podemos descargar obras maestras de la literatura científica, artículos recientes de investigación, conferencias magistrales…vemos que la mala información es la que más corre, va más rápido y está más presente. Este éxito tiene que ver con lo más importante que aporta esa mala información, y más que datos, pruebas o conclusiones, corre como la pólvora porque está llena de emociones, de miedos, de enfados, de sentimientos de injusticia, y esto es más interesante de compartir, éxito seguro en tu red social.
Descubramos algunas claves a tener en cuenta:
- Además, el impacto emocional tiende a solidarizar a las personas, a unirlas compartiendo, se identifican y van creando una masa de gente convencida de estar informándose. Son muchos pensando lo mismo, hablando de lo mismo constantemente, comparten muchos vídeos, conoce mucha gente interesante que ha leído, gente que sabe mucho del tema, o al menos conocen personas que conocen al que sabe mucho.
- Y en todo este rio revuelto hay quien saca mucho beneficio y las pseudociencias son de las que más porque funcionan con todas esas peculiaridades nombradas de la mala información. Una pseudociencia cabrea, mete miedo, pero también aporta camaradas, da respuestas sencillas aparentemente muy intelectuales, en las que se puede creer con poco esfuerzo, pero con ilusión y esperanza. Además, suelen conferir cierto orgullo porque la persona se siente especial después de tanto esfuerzo emocional, ha conseguido dar con un tesoro, algunos hasta tienen una nueva fe, filosofía o ciencia. Nada de esto es gracioso, ni baladí.
- Y si, muchas veces la gente es consciente -desde cierta distancia- de que todo esto tiene una pinta muy fea y un modo de funcionar un poco sectario, pero ¿realmente todas las pseudociencias son sectas destructivas? No, la mala información es mala información en la que cualquiera puede llegar a creer y caer (¿no has cambiado nunca una creencia?). Para convencer con esa mala información muchas veces si se usan dinámicas similares a las de las sectas, pero lo más importante, la privación absoluta sobre la capacidad de razonar en libertad es lo que determinará ante qué tipo de problemas estamos, si ante una persona con mala información/formación, o ante una persona captada por un grupo de manipulación y abuso psicológico (Grupo MAP), comúnmente conocido como secta destructiva.
- Las técnicas de manipulación, coerción y persuasión que determinados grupos ejercen para captar y adoctrinar es algo muy particular, y aunque las pseudociencias en su modo de influir son muy manipuladoras, y su peligrosidad para las personas es más que evidente, no es lo mismo que estar captado. Es importante que empecemos a diferenciar estas situaciones porque todavía es mucho más importante saber ayudar. El adepto a una secta destructiva está totalmente limitado -de modo no consciente- en su capacidad racional y emocional de defenderse del grupo, por lo tanto, nos necesita. La desinformación se puede combatir dando más información, analizando, planteando debates, recomendando libros, etc. pero una persona captada nunca será fácil ayudarla dándole información directamente, más bien al contrario. Las personas que han querido ayudar así y me lo comentan en consulta han experimentado el paradójico efecto de ver que la persona se cerraba, se radicalizaba más, volviéndose más ferviente en la defensa de aquellos argumentos que se pretendían tumbar.
- Pero más asombroso todavía es ver cómo esta persona que defiende a ultranza una postura, un día cambia completamente y puede defender lo contrario con la misma vehemencia. Este modo de actuar se puede comparar con la evolución que algunos grupos sectarios hacen con sus ideas primigenias incuestionables. Cómo las flexibilizan en función de intereses es un buen ejemplo de cómo funciona la mente de una persona adoctrinada. Se conocen grupos que han cambiado la fecha del fin del mundo hasta en 5 ocasiones, y siempre han sabido recalcular justificándolo. Gurús que afirman no comer nada pero que sometidos a vigilancia admiten tomar zumos y comida liquida por la presión. Idealización de alimentos hasta el punto de prescribirlos que de pronto son totalmente censurados, por ejemplo, la leche cruda es lo mejor y más natural y cuando alguien enferma pasa a no ser adecuada por culpa de que el ambiente la contamina, no porque tenga que ser pasteurizada. Todos estos cambios se hacen sin perder adeptos. No hay argumentos racionales en estos grupos, hay poder absoluto y tiránico sobre las emociones de sus adeptos, y eso es básico comprenderlo para poder ayudar.
- Si estas frente a un familiar o amigo que de pronto expresa ideas muy raras para ti, pero que las defiende aún cuando esto le supone alejarse de su entorno, pon una bandera roja en alto e infórmate bien de cómo ayudarle, darle muchos datos con la mejor intención y cariño no va a ser suficiente. Muchas veces, me remito a la entrevista que Jordi Évole hizo a Miguel Bosé a propósito de su negacionismo del COVID como ejemplo de lo poco efectivo que es informar y confrontar cuando alguien cree en algo con absoluta convicción. Creo que Évole fue muy bueno y cuidadoso en su preparación, tono, intención, información…pero si finalmente Bosé solo se sintió mal tratado y atacado, algo no se tuvo en cuenta, y para mí fue su emoción.
Desde Centro TAP podremos acompañarte para resolver todas las dudas que este tema te susciten, para ti, para un familiar, amigo/a… estamos convencidas que un asesoramiento profesional puede evitar situaciones de mayor riesgo. Contacta con nosotras si sientes que existe algo en tu entorno que no está funcionando como desearías.